El perro, la bici y la cortinilla.
Los jubilados que están de charrada al solcico (o la fresca, según).
La casa que cierra la puerta sin pestillo.
La mobylette para ir a la parcela.
Las campanas un domingo a mediodía.
La gente que te saluda por la calle sin conocerte.
Los bandos municipales echados por megafonía.
La tranquilidad de las calles.
La gallina que va por libre.
Visitar a alguien sin avisar, sin ninguna razón especial, sólo porque pasabas por allí.
Las cigüeñas en el campanario.
El olor a verano.
Ver el horizonte entre las casas.
El río.
El perro.
La bicicleta.
Y la cortinilla.