Era un deseo que tenía desde hacía tiempo, eso de hacer un supermaratón con la trilogía de El Padrino, ahí, las tres películas todas seguidas (unas 10 horas más o menos). Al final, no ha sido un maratón propiamente dicho, hace unas semanas vi la primera parte y este fin de semana pasado la segunda, ahora sólo falta la última. Después de volver a ver esta segunda, he llegado a una conclusión (que es doble): o queda muy bien eso de decir que segundas partes nunca fueron buenas dándote un aire de cinéfilo pedantón o yo no tengo ni puta idea. Luego hay una tercera posibilidad y es que mi locura por las historias de la mafia me haya afectado, ya a estas alturas, el cerebro. Bueno, en realidad, todo esto es sólo para decir que la segunda parte de este gran clásico (de todos los tiempos) me parece genial y que disfruté como una enana. Ahora sólo espero tener un hueco pronto para poder concluir el ciclo Corleone. Y para terminar qué mejor que una gran frase (muy educativa por cierto) de un gran estratega:
"Si hay algo seguro en esta vida,
si la Historia nos ha enseñado algo,
es que se puede matar a cualquiera".
Michael Corleone, El Padrino (2ª parte)
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Post-data: sugerencia de regalo a mí (mi persona): La serie completa de Los Soprano (por si alguien está pensando en tener un detalle...yo sólo sugiero)
1 comentario:
Si te soy sincera, yo también creo que la segunda parte es si no igual, al menos casi tan buena como la primera. La tercera ya es otra historia... esa me hizo menos gracia jajaja. Y sí, yo confieso que también tengo devoción por esas historias de mafiosos y criminales. ¡Tienen un no sé qué que engancha!
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